¿Cómo alimentar a tu bebé según su edad?
Entre los biberones de leche materna o de fórmula de los primeros meses y los primeros alimentos más o menos sólidos, la alimentación del bebé evoluciona rápidamente.
En pocos meses, tu bebé pasará de tomar leche a diversificar su alimentación. Como padres, esto significa que vais a tener que equiparos en consecuencia. De los primeros biberones a los primeros platos, ¡el tiempo vuela!
Por supuesto, la hora de comer es un momento agradable que se comparte en familia. Así que tienes que facilitarte las cosas, al tiempo que te aseguras de que tu hijo come bien, en buenas condiciones y de forma saludable.
Aquí encontrarás una breve guía para ayudarte con el aspecto alimentario (lactancia materna, diversificación de alimentos, comidas sólidas) y el aspecto material de las comidas (posición, accesorios, etc.).
Alimentación primeros meses
Durante los primeros meses, el bebé se contentará con tomar leche, el único alimento que es capaz de digerir.
Tanto si se trata de la lecha materna como de la leche infantil de fórmula, ésta se convertirá en la base de su alimentación durante los 3 primeros años.
La leche materna
Tanto si decides darle el pecho como si decides utilizar el biberón, la leche sigue siendo el único alimento que le darás a tu bebé durante los primeros meses.
Un bebé recién nacido toma entre 600 y 650 ml de leche al día. Con 5, 6 o 7 tomas al día, según su apetito y su ritmo, tu pequeño aprenderá a reclamarte hacia el final del primer mes.
En general, durante el día le darás un total de 7 biberones de 90 cl.
Si deseas que tu bebé se críe con leche materna, pero no necesariamente quieres darle el pecho, deberás utilizar un sacaleches. Si sacas la leche para tu bebé con antelación, podrás preparar un biberón para dárselo durante el día.
Compte tenu du temps que représente l’allaitement dans une journée, il est important de créer les bonnes conditions pour un moment agréable, aussi bien pour la maman que pour bébé.
Cojín de lactancia
Un cojín de lactancia o maternidad facilita y agiliza la adopción de una postura cómoda para alimentar al bebé.
El cojín distribuye el peso del bebé sobre el brazo para evitar dolores de espalda. Tanto el bebé como los padres estarán bien acomodados durante la lactancia.
Leche etapa 1
Al igual que la leche materna, contiene todos los elementos necesarios para el desarrollo y el crecimiento del bebé.
Con una frecuencia de 5 a 7 biberones por día, mezclaremos una dosis de leche en polvo para bebés de 0-6 meses con su volumen correspondiente de agua. Durante sus primeros 4 meses el bebé tomará entre 90 y 120 ml de leche por comida.
El biberón
Tanto si optas por darle el pecho como si no, necesitarás un biberón. Más concretamente, varios biberones, en función de la edad del bebé, de la etapa de su alimentación y de las condiciones en las que le des el biberón.
Entre sets para recién nacidos, biberones anticólicos, biberones de plástico sin BPA, biberones de cristal y un largo etcétera de opciones será complicada la elección. Lo esencial es estar bien equipado con biberones adaptados a la edad del bebé y disponer de varios para poder garantizar una rotación a lo largo del día.
De manera general, la capacidad del biberón incrementa de 30 ml en 30 ml. A medida que tu peque crezca será necesario cambiar de biberón.
Leche etapa 2
A partir de los 4 meses, los bebés se encuentran en su segunda etapa de desarrollo. Es entonces cuando empiezan la diversificación alimentaria y el descubrimiento de nuevos alimentos, esencial para su desarrollo.
Diversificación alimentaria
Sin hablar de una verdadera dieta sólida, empezaremos a introducir verduras y fruta en la alimentación del niño.
Aunque la leche (etapa 2) sigue representando el alimento principal, puedes empezar a preparar platos para el almuerzo, por ejemplo. Es una buena idea empezar por las verduras, intentando variarlas cada día. Las patatas son perfectas como base para un puré de verduras.
En cuanto a la fruta, se la empezaremos a proponer un poco más tarde, entre 2 y 3 semanas después de haber empezado con las verduras. ¿Por qué?
Sencillamente, debido al azúcar. Es probable que el sabor dulce de la fruta le atraiga más que el de las verduras. Si los introducimos al mismo tiempo en su dieta, puede que el peque sea más reticente con las verduras.
Recomendamos cocinar los alimentos al vapor y sin sal. Los nutrientes se conservan mejor, al igual que los sabores.
Para hacerte la vida lo más fácil posible, podrás contar con los robots de cocina. Pueden utilizarse para cocer alimentos al vapor. Conscientes de que es mejor la comida casera que utilizar siempre la comprada, este tipo de aparatos facilita la preparación de las comidas del bebé conservando las cualidades nutritivas de los alimentos.
En relación con la fruta, empieza por las compotas. Los bebés se acostumbran rápidamente a ellas y las aprecian. Si le propones una fruta que no le gusta, inténtalo de nuevo unos días más tarde. No le fuerces, anímale a probar de nuevo. A veces, en pocos días, los gustos de los bebés cambian al descubrir cosas nuevas. La última etapa de la diversificación alimentaria es la introducción de proteínas animales. Una o dos semanas después de haber empezado con la fruta puedes empezar a proponer a tu bebé papillas con carne, huevo o pescado. Al cabo de 2 o 3 semanas de haber introducido este otro tipo de alimentos, tu peque comerá al menos un plato con cuchara al día.
Esta etapa de diversificación alimentaria es muy importante. La transición debe hacerse con delicadeza, teniendo presente los gustos de tu bebé. Sobre todo, no debes enfadarte, ni estresar a tu bebé. Debe ser un momento agradable tanto para los padres como para el bebé.
Leche etapa 2
Aunque hablamos de diversificación alimentaria, el bebé aún es alimentado mayoritariamente con leche.
Hasta los 12 meses, el bebé tomará leche para la etapa 2, rica en elementos esenciales para su crecimiento. A esta edad, los bebés toman unos 4 biberones al día, además de las cucharadas de puré que pueden tomar a la hora de comer.
La capacidad de los biberones de la etapa 2 debe corresponder a las necesidades del bebé, es decir, unos 210 ml/comida.
A esta edad, la leche puede enriquecerse con harina, particularmente por la noche. Esto ayuda a diversificar la dieta y estimula al bebé a digerir los cereales. No dudes en pedir consejo a tu pediatra.
La alimentación del bebé también es una cuestión de logística
Cuando hablamos de alimentar al bebé, por supuesto que nos referimos a la nutrición, pero a menudo nos olvidamos de hablar del material y la logística.
Sin embargo, como bien saben los padres primerizos, estar bien equipado facilita la preparación y la hora de la comida. Ya se trate de biberones, cojines de lactancia o tronas, es muy importante adaptar el material a las comidas y a la edad del bebé. Este punto es esencial para un confort óptimo durante las comidas.
Debes prever bastantes biberones para la rotación diaria (al menos 5). También tendrás que pensar en otros accesorios como:
● La trona
● Asiento elevador
● El babera con recogedor
● La cuchara blanca
● Los bols
● Los sets de vajilla
● El robot de cocina (Babycook, etc.).
Aunque no se piense en todo ello de inmediato, estos accesorios son tan indispensables como prácticos, por eso es importante tenerlos en cuenta para equiparse correctamente.
Con toda esta información te sentirás preparad@ para dar sus primeras comidas a tu bebé. Recuerda que estos momentos no tienen por qué ser complicados, sino todo lo contrario. Debe ser un momento de complicidad entre los padres y el bebé. Es más, es durante estos primeros meses que el bebé descubre el gusto de los alimentos por lo que es importante que sean momentos amenos y de aprendizaje.