Guía para el cuidado de la ropa

Reduce tu impacto ambiental cada vez que laves tu ropa

Lavar bien la ropa

Buenos hábitos

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Comprender los símbolos de cuidado

La forma en que cuidamos nuestra ropa desempeña un papel esencial en su durabilidad y en nuestro impacto sobre el planeta. Nuestros hábitos de lavado y planchado nos permiten limitar el desgaste de nuestras prendas, mantener su forma y limitar la energía utilizada para su mantenimiento. Lo que también significa que duran más.

¡Económico y ecológico!

Para ayudarte, puedes utilizar la información de las etiquetas de tu ropa, que te ayudaremos a descifrar.
A continuación, encontrarás los símbolos que utilizamos en nuestras etiquetas de cuidado:

El producto debe lavarse a mano
El producto puede lavarse a máquina a la temperatura máxima indicada.
Si la cubeta está marcada con una línea, deberás utilizar un ciclo de lavado más moderado, como el ciclo para sintéticos, que tiene un centrifugado medio.
Si la cubeta está subrayada con dos líneas, deberás programar un ciclo de lavado muy suave, el ciclo para delicados, que tendrá un centrifugado bajo.
El producto debe secarse al aire libre
Prohibido planchar.
Planchar a baja temperatura, 110°C como máximo y sin vapor.
Planchar a una temperatura máxima de 150°C, se puede usar vapor.
Para fibras como el lino y el algodón, planchar con vapor hasta 200°C como máximo.
No limpiar en seco.

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Hábitos fáciles de poner en práctica a diario

Antes de poner la ropa en la lavadora

Para que no te salga la ropa de la lavadora en otro color, recuerda separar por colores la ropa para la colada.
Elige el lavado en frío. El lavado en agua caliente daña ciertos tejidos, haciendo que se desprendan más fibras.
Te recomendamos que laves la ropa del revés, ya que así se protegen los tejidos y se conservan los colores. A excepción de las sudaderas, cuyo forro polar podría estropearse si se lavan del revés.
Si la ropa está manchada, lava la mancha antes de meter la prenda en la lavadora. Así evitarás que las manchas se incrusten en el tejido.
El lavado a máquina es una de las principales fuentes de contaminación de plásticos en los océanos. Cada vez que lavas, tu ropa sintética libera diminutas fibras de plástico al agua. Adoptar mejores hábitos de lavado puede marcar la diferencia.
En el caso de materiales sintéticos como el poliéster, el acrílico o el elastano, asegúrate de lavar la ropa en una bolsa de malla para el lavado y así evitar liberar microplásticos en el agua.

Una vez dentro de la lavadora

Lo ideal es que entre la ropa y la parte superior del tambor solo quede un espacio de un palmo. Un tambor lleno reducirá el roce entre las prendas y, al mismo tiempo, la cantidad de fibra que se desprende de ellas.
Opta por un detergente líquido en lugar de detergente en polvo: el efecto «rascador» de los granitos del detergente en polvo aumenta la cantidad de fibra que se pierde en comparación con los detergentes líquidos.
Piensa en utilizar menos detergente y, si es posible, utiliza detergente ecológico, que reduce el riesgo de alergias e irritaciones cutáneas. Utilizar demasiado detergente puede dejar la ropa llena de residuos y hacer que resulte incómoda de llevar.
No es necesario utilizar suavizante, ya que contiene alérgenos, lo que no es ideal para la piel de nuestros hijos. Puedes sustituirlo por medio vaso de vinagre blanco cada vez que laves, con lo que la ropa quedará más suave. Si te preocupa el olor de la colada, no hay de qué preocuparse: no quedará olor a vinagre después del lavado.
Evita los ciclos largos:
los programas de lavado largos aumentan la fricción entre los tejidos, lo que provoca una mayor pérdida de fibras.
Selecciona una velocidad de centrifugado lenta:
Las velocidades de centrifugado más rápidas aumentan la fricción entre las prendas, lo que puede provocar que se desprendan más fibras.
Por último, saca la colada en cuanto la lavadora haya finalizado el ciclo para minimizar las arrugas y las imperfecciones.
Nota:
Utilizar la lavadora en las franjas horarias llano y valle puede suponer un ahorro de hasta un 25% en comparación con las horas punta.

Fuera de la lavadora:

Elige el secado natural, que no consume energía, no daña la ropa y ayuda a que dure más.
Tiende la ropa para que se seque, dando forma a las prendas húmedas para reducir la necesidad de planchado. Plancha solo si es necesario.
Nota:
El planchado requiere hasta una quinta parte de la energía total utilizada para un lavado estándar.

Consejos para el cuidado de la ropa (1)

por producto

Los abrigos Todos nuestros abrigos se pueden lavar a máquina. Para evitar dañarlos o dañar otras prendas, no olvides abrochar cremalleras y botones antes de lavarlos y lavarlos del revés.
Los jerséis y las chaquetas de punto Todos nuestros jerséis y chaquetas de punto se pueden lavar a máquina a 30 °C como máximo. Lava tus prendas de punto por separado utilizando detergente para prendas delicadas, que contiene menos enzimas y mantendrá la suavidad de tus prendas. No utilices la secadora; seca los jerséis en posición horizontal sobre una toalla, doblando las mangas para que no se estiren. Si quieres, puedes plancharlos del revés para no estropear el punto. Y para que los jerséis conserven su forma durante mucho tiempo, guárdalos en posición horizontal en el armario.
Las sudaderas Las sudaderas se pueden lavar a máquina a 30 °C. El truco es lavarlas del derecho para conservar el forro polar. Para secarlas, déjalas secar al aire libre en una tendedero o sobre una toalla para evitar que se deformen.
Las camisetas y los bodies Te recomendamos que laves las camisetas y los bodies en la lavadora a 30 °C. El truco está en lavarlos del revés para conservar el estampado o el bordado de la camiseta o del body. Para su secado, opta por tenderlos al aire libre.
Las camisas Las camisas de algodón pueden lavarse a máquina a 30 °C. Para que no salgan demasiado arrugadas de la lavadora, utiliza un centrifugado moderado y cuélgalas en una percha para que se sequen al aire mientras estén húmedas.
Los vaqueros No es necesario lavarlos con demasiada frecuencia; puedes lavarlos después de usarlos entre 15 y 30 veces, a menos que estén manchados. Lávalos del revés, a máquina a 30 °C para evitar las antiestéticas marcas blancas y con colores similares. Déjalos secar al aire para evitar que se deformen. Sécalos del revés y no los exprimas. Otro método de lavado sencillo: sumerge los vaqueros en agua a una temperatura de entre 15 °C y 20 °C durante 30 minutos. Un simple remojo los lavará correctamente. Si quieres plancharlos, es mejor hacerlo del revés.
Los bañadores Después de nadar, en la piscina o en el mar, recuerda aclarar tu bañador con agua limpia y secarlo. Para lavarlo, pon el bañador del revés y lávalo a máquina a 30 °C. A continuación, déjalo secar al aire.
Los calcetines Nuestros calcetines se pueden lavar a máquina a 30 °C. Para evitar perder los calcetines de nuestros peques, recuerda lavarlos en una bolsa de malla. Lo ideal es secarlos al aire libre y no en secadora.
Los zapatos Para zapatos de gamuza, ante o gamuza sintética: Séquelos con un cepillo de dientes suave. Si están muy sucios, cepíllelos con un cepillo de dientes humedecido en una solución de 2/3 de agua tibia, 1/3 de vinagre blanco y una gota de jabón lavavajillas. Enjuáguelos con una esponja bien escurrida. Para zapatos de lona o poliuretano liso: Límpielos suavemente con agua fría y jabón. Si los cordones están sucios, puede lavarlos a máquina. Colóquelos en una bolsa de lavandería para evitar que se enreden. De lo contrario, sumérjalos en un vaso con agua jabonosa y vinagre blanco.

Nota

No es necesario lavar toda la ropa después de usarla. Pero ¿con qué frecuencia debes lavarla?
  • Vaqueros después de entre 15 y 30 usos
  • Ropa deportiva después de 1 uso
  • Pijamas después de 7 usos
  • Jerséis de lana después de entre 10 y 15 usos
  • Vestidos después de entre 4 y 6 usos
  • Camisetas de algodón después de entre 4 y 5 usos
  • Ropa interior, bodies y calcetines después de 1 uso

Quitar una mancha(2)

¿Cómo se quita una mancha de pintura acrílica?

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Elimina el exceso de pintura con un utensilio de punta redondeada.

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A continuación, pasa la mancha por agua fría y frótala con jabón de Marsella.

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Si la mancha está muy incrustada, utiliza un paño limpio empapado en alcohol isopropílico para frotar la mancha desde fuera hacia dentro.

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A continuación, lava según las instrucciones de lavado.

¿Cómo se quita una mancha de boli?

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Seca la mancha con papel absorbente.

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A continuación, coloca el objeto sobre un paño blanco limpio y frota la mancha con otro paño blanco empapado en alcohol quirúrgico.

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Lava la prenda siguiendo las instrucciones de cuidado.

¿Cómo se quita una mancha de rotulador?

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Limpia la mancha con un paño empapado en alcohol quirúrgico y lava la prenda siguiendo las instrucciones de cuidado.

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En algodón blanco, utiliza lejía.

¿Cómo se quita una mancha de chicle?

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Frota la mancha con un cubito de hielo para endurecer el chicle o pon la prenda en una bolsa y déjala en el congelador.

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Retira suavemente el chicle con la hoja de un cuchillo de punta redondeada.

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Continúa con un lavado normal, según las instrucciones de cuidado de la prenda.

¿Cómo se quita una mancha de leche?

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Enjuaga rápidamente la prenda con agua fría y frótala bien con jabón de Marsella.

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A continuación, déjala en remojo antes de ponerla en la lavadora.

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Si las manchas de leche no son recientes, puedes probar técnicas eficaces de eliminación de manchas, como aplicar alcohol de 70º o bicarbonato sódico antes de lavar.

¿Cómo quitar una mancha de chocolate?

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Si la mancha está en un tejido de color claro, elimina el exceso de chocolate, corta un limón por la mitad y exprime una mitad sobre la mancha.

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Frota suavemente. Deja actuar durante diez minutos y lávala según las instrucciones de cuidado.

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Si la mancha persiste, frótala con un paño limpio empapado en vinagre blanco. Aclara y lava siguiendo las instrucciones de cuidado.

Para cualquier otro tipo de tejido, enjuaga inmediatamente la mancha con agua fría. Si la mancha está muy incrustada, rasca el exceso con una rasqueta de punta redonda. A continuación, utilice una esponja limpia con una gota de detergente líquido y agua fría para frotar suavemente la mancha. Limpia más allá de la mancha y aclara con abundante agua fría.

¿Cómo se quita una mancha de salsa de tomate?

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Aclara la prenda con agua fría. 2. Sumerge la mancha en vinagre blanco diluido en agua. Deja actuar y luego aclara.

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Para el algodón blanco, puedes utilizar lejía diluida, aplicada con pequeños toques sobre la mancha, y después aclarar.

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Si la mancha persiste, deja la prenda en remojo durante dos horas en vinagre blanco sin diluir o leche caliente. Lávala siguiendo las instrucciones de lavado. Elige un detergente para tejidos blancos.

¿Cómo se quita una mancha de frutos rojos?

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Hierve aproximadamente 1 litro de agua.

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Estira la tela manchada sobre un lavabo y vierte el agua hirviendo sobre la mancha desde arriba. No aplicar sobre tejidos delicados.

¿Cómo se quita una mancha de hierba?

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Coloca la prenda sobre un paño blanco limpio y frota la mancha con otro paño blanco empapado en vinagre blanco o alcohol quirúrgico.

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Lávela siguiendo las instrucciones de cuidado.

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En el caso del algodón blanco, limpia la mancha con un paño blanco empapado en zumo de limón o agua con una gota de lejía y, a continuación, lava la prenda siguiendo las instrucciones de cuidado.

Nota

Para las manchas difíciles o las que no sepas de qué son, no dudes en pedir consejo a un profesional.

(1) Antes de lavar, no olvides comprobar los símbolos de la etiqueta de la prenda. Éstos indican las condiciones óptimas de lavado, secado y planchado para cada prenda.

(2) Antes de utilizar cualquier producto quitamanchas, aunque sea poco agresivo, te recomendamos que realices siempre una prueba previa en una zona poco visible de la prenda para evitar cualquier riesgo de deterioro.