El baño
Nunca debemos dejar al bebé solo en el baño, pero a pesar de todo, nos aseguraremos de que nada pueda poner en riesgo su seguridad.
● Protección de grifos: durante el baño, los grifos pueden estar muy calientes. Para evitar las quemaduras, vamos a protegerlos.
● Ponemos fuera de alcance todos los frascos de productos (gel de ducha, crema, champú, etc.).
● Instalamos una alfombra antideslizante: así no corres ningún riesgo incluso sosteniendo al bebé.
También protegemos las esquinas y los enchufes eléctricos. Atención a los muebles del baño y sus pequeñas puertas. Si puedes, instala un sistema de bloqueo de puertas, evitarás golpes innecesarios.
Las otras habitaciones de la casa
Según la disposición de tu vivienda, hay numerosos puntos que asegurar:
● Escaleras: instala barreras de protección delante de cada una. Esto evitará que tu hijo/a pueda acceder a este espacio peligroso.
● Las esquinas de muebles: instala protectores de esquinas. Como el bebé es pequeño, su cabeza llega al nivel de las mesas y otros muebles. ¡Cuidado con los golpes!
● Protegemos todos los enchufes eléctricos a su alcance: deben instalarse tapas de enchufes. También evitaremos dejar cables de alimentación de diferentes accesorios enchufados a la vista.
● Los bloqueadores de cajones: en todos los muebles equipados con cajones al alcance del bebé, vamos a instalar estos accesorios de protección. Evitarán que un cajón pueda caerle encima, o que intente trepar por él o que se pille los dedos.
● Evitamos dejar objetos a su alcance: el bebé está a la altura de todos los muebles bajos donde fácilmente depositamos el contenido de nuestros bolsillos. ¡A evitar!
Para garantizar la seguridad de tu peque y asegurarte de no olvidar nada, ponte a ras del suelo, como él. Desde ahí, estando a su altura, verás fácilmente todos los objetos tentadores para él, así como todas las zonas que representan un riesgo (puertas, pomos de puertas, esquinas de muebles, etc.).