¿Cómo hacer de tu casa un lugar seguro para el bebé?

¿Estás esperando la llegada de un bebé? ¿Te preguntas sobre su seguridad en casa? 

A decir verdad, cuando tu peque llega a tu vida y en casa, rápidamente te das cuenta de que muchas cosas pueden representar un peligro potencial: escaleras, esquinas de mesa, enchufes eléctricos, puertas, cajones, etc.

Desde la cocina, pasando por la habitación o el baño, hay bastantes detalles a los que hay que prestar atención para asegurarse de evitar accidentes.

Veamos juntos todo lo que hay que tener en cuenta para evitar que los niños se hagan daño en casa.

Empezamos a crear un entorno seguro en casa antes de la llegada del bebé

Incluso antes del nacimiento de tu peque, te recomendamos revisar rápidamente todas las habitaciones de la casa para hacer un balance rápido.

Lo mejor es avanzar habitación por habitación.

La habitación del bebé

Aunque todavía no pueda deambular, tu pequeño intentará agarrar todo lo que esté a su alcance, para eventualmente llevárselo a la boca. 

Además, nos aseguraremos de que esté perfectamente seguro durante su sueño. Por lo tanto, prestaremos atención a todo esto:

● Barrera de cama: indispensable para que el bebé duerma seguro.

● Retiramos los textiles de la cama: excepto la sábana ajustable del colchón quita los peluches y las sábanas para evitar que el bebé los agarre durante la noche (las sábanas pueden enredarse alrededor de él).

● Tope de puerta: esto evita que tu hijo/a se encierre solo en la habitación sin querer. También evita los pellizcos en los dedos.

● Vigilabebés: este accesorio permite escuchar a tu bebé a cierta distancia y poder intervenir en caso de problema.

También se puede añadir una protección para que no se pille los dedos en la cómoda (bloqueo para cajones) así como protectores de esquinas. Durante sus primeros meses, al no verás la necesidad, pero verás que pronto querrá explorar la casa a gatas.

El baño

Nunca debemos dejar al bebé solo en el baño, pero a pesar de todo, nos aseguraremos de que nada pueda poner en riesgo su seguridad. 

● Protección de grifos: durante el baño, los grifos pueden estar muy calientes. Para evitar las quemaduras, vamos a protegerlos.

● Ponemos fuera de alcance todos los frascos de productos (gel de ducha, crema, champú, etc.).

● Instalamos una alfombra antideslizante: así no corres ningún riesgo incluso sosteniendo al bebé.

También protegemos las esquinas y los enchufes eléctricos. Atención a los muebles del baño y sus pequeñas puertas. Si puedes, instala un sistema de bloqueo de puertas, evitarás golpes innecesarios.

Las otras habitaciones de la casa

Según la disposición de tu vivienda, hay numerosos puntos que asegurar: 

● Escaleras: instala barreras de protección delante de cada una. Esto evitará que tu hijo/a pueda acceder a este espacio peligroso.

● Las esquinas de muebles: instala protectores de esquinas. Como el bebé es pequeño, su cabeza llega al nivel de las mesas y otros muebles. ¡Cuidado con los golpes!

● Protegemos todos los enchufes eléctricos a su alcance: deben instalarse tapas de enchufes. También evitaremos dejar cables de alimentación de diferentes accesorios enchufados a la vista.

● Los bloqueadores de cajones: en todos los muebles equipados con cajones al alcance del bebé, vamos a instalar estos accesorios de protección. Evitarán que un cajón pueda caerle encima, o que intente trepar por él o que se pille los dedos.

● Evitamos dejar objetos a su alcance: el bebé está a la altura de todos los muebles bajos donde fácilmente depositamos el contenido de nuestros bolsillos. ¡A evitar!

Para garantizar la seguridad de tu peque y asegurarte de no olvidar nada, ponte a ras del suelo, como él. Desde ahí, estando a su altura, verás fácilmente todos los objetos tentadores para él, así como todas las zonas que representan un riesgo (puertas, pomos de puertas, esquinas de muebles, etc.).

No es necesario jugar la carta de la sobreprotección

Atención, en esta búsqueda del peligro, no veas el mal en todas partes. 

Sí, el bebé puede golpearse, sin embargo, intenta recordar tu infancia: ¡no todo estaba protegido y envuelto en papel de burbujas!

Más en serio, asegúrate de proteger todos los lugares donde tu peque puede efectivamente ir, es inútil tratar de tapar el menor rincón. Y si se golpea un poco, no te asustes, tranquilízalo.

Recuerda simplemente que siendo consciente del peligro para tu hijo/a, estarás lo suficientemente atento para evitarle los pequeños accidentes y golpes. Para el resto, todo lo que representa un verdadero riesgo, sé simplemente prudente protegiendo todos los puntos sensibles.