¿Qué comer durante el embarazo?

Entre los alimentos prohibidos para las mujeres embarazadas y la necesidad de "comer bien" durante el embarazo, ¡las preguntas sobre la alimentación son tan frecuentes como numerosas!

Hay que saber que, todo lo que consume la futura mamá también será consumido por el bebé. Las vitaminas y minerales, así como todos los elementos necesarios para el crecimiento del pequeño, son aportados diariamente por la alimentación de su madre. Por lo tanto, hay que asegurarse de comer bien, saludablemente, variando las comidas y pensando en el bien que le hacemos al bebé que crece tranquilamente.

Aquí tienes un pequeño resumen de todos los alimentos que debes evitar y todos aquellos que son muy buenos para tu salud y la del bebé.

 ¡Sigue la guía!

Embarazada, se come bien... ¡como siempre!

¿Qué significa "comer bien"?

Comer bien es, ante todo, comer saludablemente. Se privilegia la cocina casera a los platos preparados, por ejemplo. Se procura comer verduras en todas las comidas, así como frutas durante el día para asegurarse de obtener todas las vitaminas. Por lo tanto, nos aseguramos de tener una dieta variada y completa.

Comer bien durante el embarazo es, por supuesto, aportar todo lo necesario al bebé para que crezca bien y esté saludable, pero también es la mejor manera de no lamentar un aumento excesivo de peso durante los 9 meses.

Además, los alimentos ricos en vitaminas y fibra facilitan el desarrollo del embarazo. Cada vitamina ingerida permitirá tener más energía y vitalidad, incluso a lo largo de los meses, y la fibra facilita el tránsito de la futura mamá, que a veces puede ser caprichoso.

Comer bien para las mujeres embarazadas significa comer saludablemente, cocinando productos de calidad (verduras frescas, carne del carnicero, etc.), todos los días, y sin sucumbir a los productos industriales ya preparados.

¿Qué alimentos se deben evitar durante el embarazo?

Ciertos alimentos deben evitarse durante el embarazo, tanto para evitar cualquier riesgo para el feto como para su madre. Al eliminarlos de la dieta, se evita exponerse y exponer al bebé a un riesgo de aborto espontáneo, infección u otras complicaciones.

Aquí hay una lista de los principales alimentos a evitar:

  • Huevos: ya sean crudos o poco cocidos (huevo pasado por agua, por ejemplo) se debe evitar consumirlos. Solo se consumen huevos bien cocidos (huevos duros, fritos, etc.).
  • Productos a base de leche no pasteurizada: quesos de leche cruda, leche, etc.
  • Quesos: todos los quesos blandos deben evitarse, por el riesgo de transmisión de ciertas infecciones o enfermedades (listeriosis, etc.).
  • Pescado crudo: sushi, salmón ahumado, tartar, se recomienda no consumir preparaciones a base de pescados que no estén cocidos.
  • Mariscos y crustáceos: al igual que el pescado crudo, representan un riesgo.
  • Carne cruda: debe evitarse.
  • Embutidos: se recomienda evitar su consumo, al igual que la carne cruda.
  • Frutas y verduras que no han sido lavadas: se deben limpiar bien antes de prepararlas o consumirlas.

Esta lista no es exhaustiva, pero muestra cuánta atención hay que prestar a lo que se come durante el embarazo. Los alimentos que contienen sustancias potencialmente peligrosas o de riesgo (para la madre y el bebé) son bastante numerosos.

El personal médico que te atiende durante el embarazo te dará todos los consejos que necesites. Asegúrate de seguirlos y no dejes de comer los alimentos recomendados. Recuerda una cosa: ¡mucha fruta y verdura para tener todas vitaminas necesarias!

Nota importante: En esta lista, el alcohol encabeza la lista. Incluso en pequeñas cantidades, su consumo puede ser perjudicial para el feto, para su crecimiento, desarrollo y buena salud. Por lo tanto, se prohíbe el consumo de alcohol desde el momento en que se sabe que se está embarazada.

¿Qué alimentos se recomiendan durante el embarazo?

La alimentación de las mujeres embarazadas debe ser rica en vitaminas y minerales esenciales.

Por lo tanto, hay que hacer acopio de vitamina D y B12, sin olvidar la vitamina C que mejorará la absorción del hierro. En realidad, las vitaminas facilitan la asimilación por el organismo de elementos esenciales para la buena salud de la futura mamá, así como la del feto.

Encontrarás la vitamina D y la vitamina B12 en la carne, los huevos y el pescado, al igual que el hierro, mientras que obtendrás vitamina C gracias a las frutas y verduras que consumas.

Las mujeres que consumen poca carne deberán ciertamente compensar un riesgo de anemia (deficiencia de hierro) consumiendo legumbres y alimentos que lo contengan. La falta de hierro puede ser perjudicial, tanto para la madre como para el bebé. Así que, hay que asegurarse de tener un aporte diario (lentejas, espinacas, pasta, etc.).

También hay que consumir alimentos ricos en vitamina B9. ¿Por qué?

Simplemente porque la vitamina B9 contiene folatos. Estos folatos son sintetizados por el cuerpo para convertirse en ácido fólico. Este ácido no puede ser producido por el cuerpo humano, debe ser aportado mediante la alimentación. Su papel es muy importante desde las primeras semanas de embarazo. Favorece un entorno adecuado para el desarrollo del embrión.

No olvidemos los aportes de calcio

Durante el tercer trimestre, el calcio es esencial para la formación del esqueleto del bebé.

Consumiendo lácteos (yogures, quesos, etc.), gracias al calcio que contienen, te aseguras de que el peque crezca correctamente. Ten en cuenta que el agua mineral es rica en calcio y garantiza un aporte considerable.

Productos lácteos y agua mineral, he aquí cómo asegurarte aportes suficientes de calcio.